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En Bélgica, hay unos cristales famosos. Los Val Saint Lambert, nombre de una antigua abadía fundada hace más de 100 años atrás por dos franceses que compraron un edificio abandonado y fundaron una manufactura de cristales.

Esta marca de cristales, se hizo mundialmente famosa, alcanzando su apogeo poco antes de la primera Guerra Mundial. Las exportaciones de jarrones y objetos de cristal fueron enormes por ese tiempo, y la fama del cristal Val Saint Lambert, se hizo muy famosa por su excepcional pureza y brillo.

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Con la depresión económica de los años 30 todo cayó, y aunque el gobierno belga subvencionara el negocio, nunca las ventas consiguieron repuntar al punto en que estuvieron antes, hasta que la fábrica fue comprada por un gerente belga que consiguió hacer repuntar la fábrica y darle un nuevo aire al negocio. Hoy en día, esta fábrica produce un mix de 1.400 tipos de artículos de cristal diferentes.

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Esta fábrica es hoy también, un atractivo turístico, ya que se puede visitar y recorrer en su totalidad, comenzando desde el soplado para llegar al grabado del vidrio. También hay una sala de exposición con diversos objetos que están a la venta, y hay un museo de cristalería antigua, que todo el mundo admira cuando llega a observarla.

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Dentro del edificio de la fábrica, hay también un restaurante, mientras tanto, la antigua abadía ubicada al frente se renueva.

Para mí, los objetos de cristal son todo un ente de culto, al igual que los cristales de cuarzo y otro tipo de piedras semi preciosas.

Vía/ Trabel

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