Un análisis de la cultura belga exige examinar tanto los aspectos de la vida cultural compartida por «todos» o la mayoría de los belgas, independientemente de qué idioma se habla, y también, las diferencias entre las principales comunidades culturales, el pueblo flamenco de Flandes y Bruselas, el francés que hablan de Bruselas y Valonia.

La mayoría de los belgas tienden a considerar su cultura como parte integrante de la cultura europea o de la cultura occidental, sin embargo, las dos principales comunidades tienden a hacer de sus miles de opciones culturales y colectivas, principalmente dentro de su propia comunidad, cuando se va más allá.


El flamenco llama intensamente a el Inglés como una cultura de habla (lo que domina las ciencias, vida profesional y la mayoría de los medios de comunicación) y los Países Bajos, mientras que los francófonos se centran en la vida cultural en París y en otras partes del mundo de habla francesa (la Francofonía), y menos exterior.

Un verdadero debate científico también incluiría la discusión de las diferentes culturas de las minorías étnicas belgas como la de Judios que han formado un notable componente de la cultura flamenca – en particular el de Amberes desde hace más de quinientos años.